Tú eres au pair, es decir, una educadora de esos hijos. Evidentemente adoras a esos peques pero NO SON TUYOS es decir, que para ti, todos los críos son iguales, ninguno es mejor que otro y los ves de manera objetiva en comparación con otros. Pero tus HP evidenemente no y eso puede hacer tu labor MUY DIFICIL a lo largo de tu estancia como chica au-pair. No debes meterte en la educación que los padres proporcionan a sus hijos SIEMPRE Y CUANDO esto a ti no te afecte. En el momento que si lo haga debes cortar de raíz y decir las cosas CLARAS y sin tapujos.
Aqui os pongo algunos ejemplos basados en hechos reales.
- Os voy a poner el ejemplo más común que me ha surgido EN TODAS las familias. El tema de la "tele". Cada vez que he llegado a una familia diferente todas me decían lo mismo "No me gusta que mi hija/s vean la TV...asi que haced siempre cualquier otra cosa menos ESO". Tú eres Mary Poppins reencarnada, cantas canciones durante todo el día, bailas, juegas con la pelota, sales a pasear 3h, das de comer (cocinas y recoges por supuesto todo), les pones a cada una 2 camisetas diferentes diarias por culpa de las babas, vas al lago a nadar si hace buen tiempo, bajas al parque durante 2h, haces puzzles, un teatro en vivo y en directo con marionetas, pintas, haces galletas con ellos e igual os da tiempo a disfrazaros y a pintaros de gatitas...Ha sido un día agotador, viene tu HD o HM y , qué hace él/ella? PONERLE LA TELE, JUSTO LO QUE A TI TE HA PROHIBIDO. Cabe destacar que durante toda tu jornada tu HK te ha pedido 1000 veces ver la tele y se te ha echado a llorar como una loca cada vez que le recuerdas que "Mamá/Papá no lo permiten ya lo sabés" por lo tanto tú te has convertido en la bruja de Blancanieves y Mummy o Daddy son los salvadores que les dejan ver la tele a las pobres criaturas...
La solución es sencilla; O TODOS MOROS O TODOS CRISTIANOS. Esto no es bueno ni para ti, ni para el crío ni para ellos. Los peques crean sin quererlo favoritismos ya que, uno le deja ver la tele y la otra persona no. Asi que o establecéis un horario (un día puede verla contigo y otro dia conmigo) o cualquier otra cosa.
- El terrible síndrome "Mamitis" o "Papitis". Tu HK sigue prefiriendo ir a los brazos de su madre o padre siempre que te ve cerca porque tu eres la au pair que a veces echa la bronca o sabe decir que "NO". Esto es un problema MUY COMÚN. Los padres en general se sienten culpables porque dejan a sus propios hijos durante todo el día en manos de otras personas (au pair, tagesmutter, guardería, escuelas...)por lo que, cuando vuelven a casa se lo consienten todo. Que no tienen ganas de comer los tortelinis en la mesa con todo el mundo o corretear con el tenedor por el jardín? Pues ala, total "es un día" y no piensan lo mucho que te ha costado a ti este mediodía a convencerlos de que se sentaran a comer decentemente (ya que, si encima luego no lo hacen con normalidad te echan la culpa a ti porque creen que los dejas a su libre albedrío). Esto quiere decir que cada vez que tu les exiges hacer algo "normal" ellos te gritan o lloran porque "QUIERO IR CON MAMÁ". Los padres se lo consienten todo porque no quieren quedar de malos para lo poco que están con ellos sin tener en cuenta que entonces te convierten a ti en la mala malísima de la película durante toda la jornada.
Esto tampoco te conviene ni a ti ni a los peques. Tampoco sirve de nada que tengan ese lazo tan fuerte con los padres insulso porque lo único que provocan es que a ti no te quieren y precisamente, te han contratado para que se sientan genial contigo y no al revés.
- La sobreprotección exagerada. Y con esto me quedo corta. Demasiados padres creen que sus hijos son unos "pobrecillos" de la vida y que sin la presencia de los padres van a morir en 2min (o menos...) Esto por supuesto tampoco te viene bien. Imaginate que CADA DÍA al ir a llevar a la peque a la guardería te monta una escena del quince solo porque hoy quiere ir con mamá a la guardería. Esto quiere decir que entre lloros y pataletas al final consigue lo que la peque quiere y no se es consciente de que va a hacer todos los días el mismo teatro. Son críos PERO NO SON TONTOS. Saben lo que quieren y como conseguirlo.
Lo peor de todo es que a raíz de cosas tan sencillas como "no quiero ir con Irene a la guardería, quiero ir con mamá" es que sin querer, la HM le está dando una gran inseguridad a la peque frente a mi. Lo ideal es decirle que DEBE IR CONMIGO porque YO SOY BUENA. Si cada vez que quiero hacer yo algo, lo tiene que hacer mamá o papá y ellos lo consienten le están diciendo insconcientemente de que yo no soy la mejor opción y ella no querrá ir voluntariamente conmigo hasta que esto cambie.
Mi consejo como au pair experimentada es; no podéis meteros en la educación que dan los padres a los hijos (es posible que te parezca mal que ya los acuesten a las 19:00 o que los duchen cada 7 dias...)pero eso NO ES ASUNTO TUYO. Ahora bien, si una actitud familiar va a afectar a tu relación con el crío decirlo claro y amablemente durante la cena =) Que a vuestros HP no les entrará la pataleta...
Hola,
ResponderEliminarMuy bueno jaja.
Yo por suerte en todas las familias que he estado les da igual que vean la tele y de hecho siempre la ven/veían algo aunque tambien intento que no se pasen todo el día delante.
Pero aparte de eso totalmente de acuerdo con todo lo demas
saludos
Bueno bueno por donde empiezo... Podría hacer una entrada-respuesta pero ya seria demasiado. Lo que si que haré sera poner en mi entrada un link a esta tuya, que se complementan jajaja.
ResponderEliminarPues te decía... Del primer punto totalmente de acuerdo, ya lo sabes. El punto de la mamitis es un síndrome de todas las au pairs. La mía me lo hace y aunque lo hables con los padres... se siguen derritiendo cada vez que el niño monta una escena porque "yo quiero a mamaaaaaa", y siguen haciendo lo mismo pero en menor medida. Como cuando los padres se van y ellos quieren ir también (y no pueden) que arman la de Dios y los padres no se dan cuenta que es salir por la puerta ellos, y se les pasa la pena penita pena de golpe.
Del ultimo punto, que te voy a contar. Una au pair siempre tiene mucho mas aguante que los padres. Si la peque chilla y chilla y chilla porque quiere una chuche, una au pair no suele dársela (y con eso consigue que no chille la niña porque sabe que es un esfuerzo inútil), pero con ellos chilla que chilla que al final les dicen eso suuuuuuuuuper educativo y suuuuuuuuper eficiente de "Si te callas te la doy". Claro que si, premiando el comportamiento de mierda.
Y ya no hablar del agobio de los niños cuando se ponen: mama mama mama mama mama mama mama, hasta que la madre les hace caso o les dice "espera" mil veces. Con una au pair al segundo "irene irene" se callan porque a pesar de que lo diga 1000 veces no el harás caso antes. Y ellos esto lo saben y saben también con quien les funciona el truco y con quien no.
Y te pondría más cosas pero no quiero ocuparte el blog XD.
Puf, cuan cierto! Estuve trabajando con una familia en la que la madre parecía pensar que si dejabas de mirar a los niños un segundo, éstos implosionarían. Y les permitían tooodo. Era oír un principio de llorera y, hala, todo lo que quisiera la pequeñina. Con lo que llegaron a que cuando intentaron ponerle freno, la niña lloraba a pleno pulmón por HORAS encerrada en su cuarto. Sin coñas. Horas a pleno pulmón. Claro que nadie parecía darse cuenta de que esos pollos conmigo no los montaba.
ResponderEliminarY el otro niño, no sólo con la au pair, sino con cualquiera que no fuese su mamá, se portaba mal, decía cosas como "eres fea/mala/no te quiero". Incluso a su abuela. Y se lo permitían porque, pobrecito, estaba muy unido a su mamá y sufría mucho cuando no estaba ella.
Estas cosas fueron el 50% de motivos por los que me fui de esa familia.
Aaay... tenéis más razón que un santo! Yo también pasé por algo así como Ladherna y fue parte de los motivos por los que me fui de la familia.
ResponderEliminarAl niño cuando no le apetecía algo, liaba unas que pa que. Lloreras de una hora y el consecuente estrés para mí por no saber qué hacer. Si me acercaba me pegaba y me chillaba como si no hubiera mañana. Así que acababa llamando a los padres. Una vez lo convencieron, pero otra hizo venir al padre y otra al abuelo para recogerlo y llevarlo a la guarde porque el niño "No quería ir a la guarde conmigo"
Cuando se lo comentaba a los padres siempre me decían que eso era normal de la edad (tenía 5 años). Pero luego no tenía mecanismo de "chantaje" positivo porque tenía prohibida la tele, la consola y el chocolate así que ya me dirás tu... Allá ellos, lo tienen super consentido y mimado ya se lo verán!